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10 ingredientes que se deben evitar en los cosméticos: la lista completa!

10 ingredientes a evitar en cosmética: la lista completa
Hoy te enseñaremos a entender qué ingredientes evitar en la cosmética porque estamos seguros de
que adquirir productos para el bienestar del rostro, el cabello y el cuerpo se ha vuelto cada vez más
difícil. Dada la amplia gama de productos existentes en el mercado y las numerosas guías de
consumo que muchas veces entran en conflicto entre sí, ha llegado el momento de aclararlo.
La lista completa de ingredientes a evitar en cosmética
Si en otro post nuestro os dimos una serie de consejos para aprender a leer las etiquetas de los
cosméticos, hoy aquí veremos a qué ingredientes estar atentos y los nombres con los que se indican
en las etiquetas. Te explicaremos todo lo que necesitas saber sobre los ingredientes a evitar en los
cosméticos y, al final de esta guía, por fin habrás entendido por qué elegir la cosmética natural es la
mejor opción que puedes darte para tu salud y belleza. ¿Listo? Empecemos.


  1. Las siliconas están actualmente prohibidas por la mayoría de los consumidores gracias a campañas
    de sensibilización cuyos riesgos son bien conocidos. Las siliconas, conocidas como “siloxanos”,
    son sustancias químicas que dan un efecto suave y de fácil extensión a los cosméticos.
    Además, el efecto sobre piel y cabello es bastante apreciable porque dejan una sensación suave y
    envolvente que nos da la idea de que el cosmético realmente funciona. Sin embargo, se trata de una
    sensación pasajera y superficial debida a la película «film» creada por las siliconas que, sin embargo,
    impide que la piel y el cabello respiren, empeorando su salud.
    Además, las siliconas son materiales estables e inertes, muy utilizados en la construcción y la
    industria, hoy considerados de alta toxicidad ambiental. En concreto, según lo establecido por el
    Comité Científico de Cosmetología de la Unión Europea, las siliconas serían dermocompatibles y,
    por tanto, no constituirían un riesgo para la piel. Sin embargo, sugerimos evitarlos porque el efecto
    suavizante y sedoso que provocan es sólo ilusorio.
    En el INCI de productos cosméticos los encontrarás listados con los siguientes nombres:
    amodimeticona;
    dimeticona;
    dimeticonol;
    ciclometicona;
    ciclopentesimoxano;
    trimetilsiloxisilicato;
    Otras siliconas indicadas con nombres que terminan en -ticona; -xiloxano; -silanoilo.
  2. Parabenos y conservantes artificiales
    ITALIA LIBRE DE PARABENOS
    Los parabenos también son ingredientes a evitar en cosmética porque, básicamente, se utilizan para
    conseguir que las cremas, champús, geles de ducha u otros productos duren más sin
    estropearse. Los parabenos alguna vez fueron considerados los mejores conservantes para los
    cosméticos, pero hoy sabemos que no es así en absoluto, ya que son cancerígenos. Los parabenos se
    encuentran entre los ingredientes más peligrosos para la piel porque pueden ingresar al torrente
    sanguíneo causando daños al sistema endocrino y también provocan alergias e intolerancias. En el
    INCI de los productos los encontrarás indicados con estas palabras:
    Imidazolidinilurea y Diazolidinilurea (liberaciones de formaldehído);
    Metilcloroisotiazolinona;
    Metilisotiazolinona;
    formalheido;
    DMDM hidantoína;
    Bencilhemiformal, 2-bromo, 2-nitropropano;
    1,3-diol, 5-bromo, 5-nitro, 1,3-dioxano;
    metildibromoglutaronitrilo;
    hidroximetilglicinato de sodio.
    Metilparabeno;
    etilparabeno;
    propilparabeno;
    isobutilparabeno;
    butilparabeno;
    bencilparabeno;
    isobutilparabeno;
    Isopropilparabeno.
  3. Petrolato y PEG
    Los petrolatos son sustancias derivadas del petróleo y su peligrosidad está ligado a la
    dermoincompatibilidad. Además, son ingredientes tóxicos y oclusivos que no dejan respirar a la
    piel y que podrían provocar inflamación cutánea, sequedad, caspa, acné y otros trastornos. Podrás
    encontrarlos listados en el INCI de cosmética con la siguiente redacción:
    Parafina liquida,
    petrolato,
    Aceite mineral,
    Vaselina,
    ceresina,
    Ozoquerita.
    A estos se suman los PEG cuyo nombre completo es Polietilenglicol o Polietilenglicol. Se sabe que
    son sustancias etoxiladas, es decir, moléculas transformadas mediante reacciones químicas con
    óxido de etileno. Lo que hay que saber sobre los PEG es su peligro para la salud de la piel y el
    cabello a pesar de que se utilizan ampliamente en cosmética como emulsionantes, detergentes,
    espesantes y humectantes.
    El amplio uso en cosmética se debe a la alta solubilidad en agua de los PEG, pero debes saber que
    estos ingredientes pueden deshidratar la piel y exponerla a graves riesgos cancerígenos. ¡No es
    todo! Los PEG son ingredientes que deben evitarse en los cosméticos también porque son tóxicos
    para el medio ambiente al no ser biodegradables.
    En el INCI puedes encontrarlos reportados como:
    CLAVIJA
    Eth (seguido de un número como PEG-2, PEG-30, PEG-400)
    Estos números corresponden a la cantidad de óxidos de etileno que forman parte del compuesto
    base. Son compuestos químicos de origen petrolífero y, por tanto, altamente contaminantes. Sirven
    para mezclar agua con sustancias grasas y oleosas que en la naturaleza no se unen espontáneamente.
    Al mismo tiempo producen mucha espuma y limpian en profundidad y en cremas, sin embargo,
    crean un efecto emoliente.
  4. Parafinas y aceites minerales
    Cuando encuentras Aceite Mineral en el INCI de un cosmético significa que contiene una sustancia
    producida por la destilación del petróleo. Se trata de un aceite barato muy común en cosmética que
    puede contener hidrocarburos que se acumulan en la grasa corporal. Es un elemento no
    recomendado especialmente para mujeres embarazadas además de no ser biodegradable y, por tanto,
    perjudicial para el medio ambiente.
    La parafina, por otra parte, es una mezcla de hidrocarburos saturados que se obtienen de la
    destilación del petróleo. Por este motivo parece muy similar a los aceites minerales y está indicado
    como si fuera la misma sustancia. Aparece como un aceite insoluble, incoloro e inodoro que se
    utiliza en cosmética por sus propiedades emolientes.
    Si se aplica sobre la piel se crea una capa muy fina que evita la pérdida de agua de las capas
    superficiales, reduciendo la deshidratación. ¿Por qué evitar las parafinas y los aceites minerales?
    Sencillo: remedio antiguo y no apto para el medio ambiente.
    En la práctica, nuestra piel sufre diariamente un fenómeno llamado «pérdida transepidérmica de
    agua», por el cual el agua que sube desde la sangre hacia la superficie de la piel se evapora en el
    medio ambiente.
    Se trata de la transpiración denominada «no perceptible», por la que perdemos aproximadamente
    medio litro de agua al día. El valor es orientativo y depende de un tema a otro ya que también está
    influenciado por el tipo de ambiente y el tipo de piel.
    Sin embargo, nuestra piel conoce este fenómeno e intenta prevenirlo a través de una barrera en la
    epidermis que intenta retener agua: la película hidrolipídica. Se trata de una capa muy fina formada
    por agua y lípidos sebáceos que tanto la parafina como los aceites minerales podrían conservar.
    De ello se deduce que la parafina líquida ayuda a que el estrato córneo se mantenga hidratado,
    mejorando el aspecto y la salud de la piel. ¿Por qué lo incluimos entre los ingredientes a evitar en
    cosmética? Porque en Lifting Nature también nos preocupamos por la salud del Planeta y, por eso,
    sus orígenes petrolíferos ya no son aceptables a día de hoy. En el INCI se reportan con estos
    términos:
    Parafina liquida;
    petrolato;
    Aceite mineral;
    Vaselina;
    Parafina;
    Cera Microcristalina o Cera Microcristalina.
  5. Alcohol
    El alcohol es un ingrediente fundamental para las pieles sensibles y propensas a tener problemas de
    regulación del sebo. De hecho, en pieles delicadas, el alcohol actúa eliminando la barrera protectora
    que ya es muy fina o casi inexistente mientras que, en pieles grasas y grasas, la agresión de este
    ingrediente provocaría un desequilibrio que aumentaría la producción de sebo.
    Hay que decir que cuando leemos el INCI los ingredientes están ordenados en cantidad y que antes
    de considerar el alcohol como gravemente nocivo debemos considerar las cantidades y tipos
    utilizados.
    Cuando el alcohol es puro se llama etanol y corresponde a un líquido inflamable incoloro que deriva
    de la fermentación de azúcares y biomasa de almidón. En cosmética se utiliza como bactericida,
    disolvente de grasas y conservante. Tiene un efecto desodorante y antiinflamatorio por lo que podría
    ser perjudicial pero no lo es en absoluto.
    Para causar un daño real, siempre hay que considerar la dosis que, en cantidades elevadas,
    contribuiría a resecar la piel y provocar que se agriete. Lo mismo ocurre con las cremas hidratantes
    con alto contenido en alcohol que, en lugar de suavizar la piel, contribuirían a secarla. Por tanto
    podemos decir que en pequeñas cantidades, en torno al 5%, el alcohol no es perjudicial.
    Si en el INCI encuentras palabras como:
    alcohol behenílico,
    Alcohol cetearílico,
    Alcohol cetílico,
    alcohol de lanolina,
    Alcohol esterilizado
    Podrás dormir tranquilo.
    De hecho, son muchas las sustancias incluidas en el término «alcohol» y el consejo que podemos
    darte para elegir unos buenos cosméticos es optar por el INCI donde este elemento aparece en los
    últimos lugares.
    Por último, recuerda que cuando un cosmético dice «sin alcohol» no significa que no esté presente
    en el INCI. Según las normas cosméticas europeas, el texto puede incluirse en productos sin alcohol
    puro y secante, pero podría contener otros tipos de alcohol que, sin embargo, se consideran
    beneficiosos. ¿Un ejemplo? Alcohol cetearílico
    .
  6. Sulfatos espumantes SLS y SLES
    SLF y SLES son emulsionantes, es decir, ingredientes que unen las partes solubles en grasa con las
    solubles en agua. También son desengrasantes que se utilizan para eliminar el sebo y la suciedad
    pero en cantidades excesivas pueden provocar sequedad, sensibilidad, irritación y caspa.
    Puede encontrarlos denominados:
    monoetanolamina (MEA) (por ejemplo, cocamida Mea);
    Trietanolamina (TEA) (por ejemplo, té de cocamida);
    Dietanolamina (DEA) (por ejemplo, Cocamida Dea);
    SLS – Laurilsulfato de sodio;
    Laurilsulfato de amonio;
    PEG – Polietilenglicol;
    PPG;
    Triclosán;
    5-cloro-2-(2,4-diclorofenoxi)fenol;
    BHA – hidroxianisol butilado – E320;
    BHT – hidroxitolueno butilado – E321.
  7. EDTA disódico y EDTA tetrasódico
    Estos términos complejos se refieren al ácido etilendiaminotetraacético, una sustancia que retiene
    moléculas de metales pesados y se utiliza para remediar tierras contaminadas. Sin embargo, debe
    evitarse por las consecuencias que provoca en el medio ambiente, especialmente en los fondos
    marinos y cursos de agua donde altera los sedimentos metálicos, poniendo en riesgo la fauna
    acuática.
    Puedes encontrarlos indicados con estos sufijos:
    -trimonio;
    -dimonio;
    -glicol.
  8. Tintes sintéticos
    Los tintes sintéticos son colores producidos en laboratorios y son nocivos porque son tóxicos,
    mutagénicos, genotóxicos y cancerígenos. Pueden dañar la piel haciéndola áspera y la mayoría de
    ellos están prohibidos en la Unión Europea.
  9. Fragancias artificiales y alérgenos.
    Los perfumes artificiales se utilizan para perfumar muchos productos de consumo y, hasta la fecha,
    no existen normas ni reglamentos que prohíban su uso. Sin embargo, una cosa es utilizarlos en velas
    y productos de limpieza del hogar y otra utilizarlos en la piel y el cabello.
    Además, el uso de estas fragancias no se especifica en las etiquetas de forma detallada y
    transparente, por lo que sus respectivos orígenes suelen ser inciertos o poco claros. Esto significa
    que bajo el título «perfume» podrían esconderse miles de sustancias químicas responsables de las
    alergias. No solo. Algunas fragancias son responsables de náuseas, dolores de cabeza y otras
    reacciones incluso al inhalarlas, por lo que siempre son preferibles las naturales.
  10. MEA TÉ y DEA
    Estas tres sustancias son agresivas y responsables del acné, la caspa y otras inflamaciones. Además,
    se ha descubierto que son cancerígenos cuando se combinan con otros ingredientes conservantes.
    MEA, DEA y TEA son agresivos para la piel porque pueden dar lugar a nitrosaminas que, de hecho,
    son cancerígenas para la piel.
    Puedes encontrarlos indicados en INCI como:
    cocamida DEA,
    oleamida DEA,
    Lauramida DEA,
    TÉ de cocamida,
    TÉ de oleamida,
    TÉ de lauramida,
    cocamida MEA,
    oleamida MEA,
    Lauramida MEA,
    linoleamida DEA,
    miristamida DEA,
    estearamida DEA,
    DEA-cetilfosfato,
    Fosfato DEA-Oleth-3,
    TÉ-Lauril Sulfato Thietanoamina.
    Y tú, ¿has probado ya la eficacia de la cosmética natural en tu piel?
    TAGS:COSMETICA NATURAL COSMÉTICA INCI PRODUCTOS COSMÉTICOS
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